Las ortiguillas de mar son anémonas muy coloridas. Son animales carnívoros, que pueden nadar y moverse y utilizan sus tentáculos urticantes para luchar entre sí, aturdir a sus presas e inclusive algunas especies, pueden tragar peces enteros.

Las ortiguillas de mar son animales tubulares de cuerpo blando con una base plana que las sujeta a una superficie y una boca central en la parte superior que está rodeada de icónicos tentáculos. Se encuentran en todos los océanos del mundo.

Bajo el agua, las ortiguillas de mar son criaturas vivas y curiosas, con largos y punzantes tentáculos que se mecen en la corriente como la hierba. Sin embargo, en los platos, sobre todo, de la costa andaluza del sur de España, estas anémonas son una delicia para los amantes de los mariscos.

¿Conoces las ortiguillas de mar? Son un exquisito bocado

Los tentáculos, antes mortales, se convierten en crujientes delicias. Las ortiguillas de mar se recogen de las rocas del fondo marino, se transportan con sumo cuidado y se fríen en un grueso rebozado. El resultado es crujiente por fuera, pero suave y gelatinoso por dentro, casi como una croqueta marina.

Además de su textura única, las ortiguillas fritas ofrecen un intenso sabor a marisco, que algunos comparan con las ostras y otros con el yodo.

Mientras está viva, la ortiguilla tiene el poder de picar, atrapar y consumir pequeños peces e invertebrados con sus tentáculos. Sin embargo, los comensales no deben preocuparse, el proceso de bañar a las criaturas en vinagre y freírlas elimina cualquier posibilidad de que se les pique la boca.

Lo que hay que saber sobre las ortiguillas de mar

Las ortiguillas son increíblemente frágiles y deben mantenerse en agua de mar hasta el momento de cocinarlas. En su hábitat natural, sus tentáculos tienen una punta de color rosa intenso. Una vez que se sacan del mar se oxidan rápidamente y pierden su llamativo color.

Por eso es difícil encontrar ortiguillas lejos de la costa andaluza, aunque no es imposible encontrarlas fritas en algunos restaurantes madrileños.

Como muchos otros manjares, ahora venerados, las ortiguillas fueron en su día un alimento de necesidad. Las anémonas de mar entraron en la dieta de las comunidades empobrecidas de la posguerra, cercanas a la costa andaluza, en los años 40.

Desde entonces se han introducido en la cultura gastronómica de alto nivel, gracias a la inventiva de los cocineros, a su sabor naturalmente intenso y a su llamativo aspecto.

Si estas de visita en el sur de España, busca las anémonas fritas en los bares y restaurantes de la costa andaluza. Aunque se pueden encontrar en algunos restaurantes de Madrid, en la costa española es donde se encuentran los ejemplares más frescos.

Ortiguillas de mar fritas crujientes con crema de patata y perejil

Desde Pescado a Casa te queremos dejar esta deliciosa receta. Antes de prepararla ten presente que las ortiguillas, que suelen buscarse en la costa mediterránea, no se conservan bien, por lo que es mejor almacenarlas en agua salada y cocinarlas frescas el mismo día de su recogida.

CÓMO CONSERVAR LOS PRODUCTOS FRESCOS DEL MAR

Ingredientes

• 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• 40 gramos de puerro cortados en rodajas delgadas
• 1/2 diente de ajo finamente picado
• 1/2 chalota finamente picada
• 700 gramos de patatas peladas y picadas en cubo
• 1 hoja de laurel
• 2 tazas de agua
• 2 cucharadas de almendras blanqueadas, cortadas en rodajas
• 1 limón
• 40 g de hojas de perejil de hoja plana
• 1 hoja de alga nori
• 4 g de polen de hinojo
• 50 g de harina de sémola
• 50 g de harina de arroz
• 1 clara de huevo
• 32 anémonas de mar, guardadas en agua salada
• Aceite vegetal para freír
• Flores comestibles
• Hojas de eneldo fresco
• Microhierbas

Preparación crema de batata y perejil

1- Calienta el aceite de oliva virgen extra en una sartén grande y agrega el puerro, el ajo y la chalota. Saltea a fuego medio por unos 5 minutos hasta que se ablanden.

2- Añade las patatas cortadas en cubo y la hoja de laurel. Agrégale agua suficiente para cubrir las verduras. Lleva a fuego lento y deja cocer por unos 15 minutos.

3- Mientras tanto, calienta un sartén pequeño y agrega las almendras. Tuéstalas suavemente hasta que estén ligeramente doradas y fragantes, teniendo cuidado de que no se quemen.

4- Una vez que estén ligeramente tostadas, coloca las almendras en un plato y deja que se enfríen ligeramente antes de rociar un poco de aceite de oliva virgen extra y zumo de limón recién exprimido para sazonar. Reserva hasta el momento de servir.

5- Una vez que las patatas estén completamente blandas, desecha la hoja de laurel y mezcla el perejil. Pasa a una batidora y bate hasta que quede una crema verde. Pasa por un colador a una cazuela limpia y mantenla caliente a fuego suave.

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Preparación ortiguillas de mar fritas crujientes

6- Precalienta una freidora a 180^o C.

7- Coloca las algas secas, el polen de hinojo y los dos tipos de harina en un procesador de alimentos y mezcla para formar una miga uniforme. Pasa a un bol y bate la clara de huevo para crear una masa suave.

8- Escurre las ortiguillas de mar del agua salada y enjuagarlas bien en agua fría. Sumérgelas en el bol para rebozarlas uniformemente y freírlas por tandas durante unos minutos en el aceite caliente, hasta que el rebozado esté crujiente y dorado.

9- Para servir, reparte la crema de patata caliente en los platos y esparce las almendras tostadas. Coloca encima las ortiguillas de mar fritas y decora con flores comestibles, hojas de eneldo frescas y microhierbas. Termina con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y sirve inmediatamente.

Ahora que conoces que son las ortiguillas de mar, desde Pescado a Casa, te invitamos a que te animes a preparar la exquisita receta que hemos compartido o cualquier otra de tu preferencia. Y no olvides que puedes comprar los mejores pescados y mariscos desde la comodidad de tu casa a través de pescadoacasa.com.