El pescado aporta una gran fuente de nutrientes ayudándonos así a mantener una dieta equilibrada y saludable. El valor nutritivo va a depender de diferentes variables como pueden ser: la especie, la edad, el medio en el que vive, la alimentación o la época de captura.

Los pescados suelen ser bajos en calorías. También son buenas fuentes de proteínas de un alto valor biológico, debido a que las proteínas aportadas son hidrosolubles como también liposolubles. Además, muchas especies son ricas en ácidos grasos poliinsaturados omega-3. Cuyo beneficio para la salud es cada vez más importante.

Los principales componentes del pescado son:

Grasas: La grasa que proveniente de los pescados varía entre un 0,1% y un 15% en función del tipo de pescado. Todos ellos se pueden clasificar de la siguiente manera:

• Pescados blancos o magros: Son pescados que contienen al menos un 3% de grasa, como el bacalao, el gallo, la lubina, merluza…
• Semigrasos: Pescados que contienen entre un 3% a un 5% de grasa, como puede ser el besugo, dorada, rodaballo…
• Pescados azules o grasos: Contiene más de un 5% de grasa e incluso puede llegar al 15% como pueden ser algunos pescados como el atún, el bonito, la caballa, el boquerón …

Vitaminas: El pescado contiene diferentes cantidades de vitaminas hidrosolubles, se fundamentan en vitamina B1, B2, B3. Algunos pescados como las sardinas, los arenques o incluso las anchoas también incluyen la vitamina B12. Además de contener vitaminas liposolubles como puede ser la vitamina E, presente en diversos pescados en cantidades significativas y vitamina A y D abundante en su hígado.

Proteínas: Su contenido proteico varía entre el 15 o 24% dependiendo del tipo de pescado. Las proteínas también son muy importantes, debido a que contienen aminoácidos esenciales para la vida. Los más destacados son la metionina, cisteína, treonina, lisina, ya que son imprescindible para el crecimiento y desarrollo de los niños. Por último encontramos el triptófano, que a diferencia del anterior este es imprescindible para la formación de la sangre.

Minerales: El pescado fresco supone también cuenta con un gran aporte en sodio. El sodio aumenta en las conservas o también en pescados curados o ahumados. El hierro suele encontrarse en la mayoría de los pescados, sobre todo en los de mar antes que los de agua dulce.

Los pescados se convierten en alimentos fundamentales dentro de lo que se considera una alimentación equilibrada y cardiosaludable debido a que poseen propiedades nutricionales.

Todos estos componentes hacen del pescado un alimento esencial en nuestra dieta, destacando el pescado azul gracias a su contenido en grasas cardiosaludables.

Adecuado para personas sanas y enfermas:

Las propiedades nutritivas de los pescados otorgan a los alimentos beneficios para la salud. Eso hace que la ingesta se convierta en una dieta sana y equilibrada constituyendo una forma de prevenir la aparición de ciertos dolores. El pescado ofrece múltiples posibilidades en la cocina, junto a distintas características nutritivas convirtiendo al pescado en un alimento indispensable en la dieta y recomendable en todas las edades y en cada etapa fisiológica.

Todos estos componentes hacen que el pescado se convierta en un alimento esencial en nuestra dieta.

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